Los ministros de la Unión Europea responsables del Empleo se comprometieron hoy a promover la movilidad laboral, la adaptación de empresas y trabajadores a las 'demandas cambiantes de los mercados de trabajo', a fin de frenar el desempleo.
Los Veintisiete acordaron aquí prestar especial atención al desempleo de larga duración, que consideran que 'tendrá consecuencias futuras en los sistemas europeos de protección social', explicó en rueda de prensa el titular sueco, Sven Otto Littorin, cuyo país ocupa la presidencia de la UE.
Para ello, los ministros europeos piden la elaboración de estrategias nacionales 'temporales y específicas' destinadas a crear empleos, así como una mejora en las condiciones de trabajo para estimular 'vidas laborales más largas', lo que podría ayudar a mantener los sistemas de seguridad social.
La UE no tiene poderes sobre las políticas de empleo, que son competencia nacional, pero los Veintisiete sí pueden coordinar sus acciones en esa área.
Dado el impacto de las políticas económicas en el mercado laboral, los titulares de Empleo también abogaron por una mayor 'colaboración transversal' entre los consejos de ministros de Economía y Finanzas, y los de Empleo y Asuntos Sociales.
'Si analizamos lo sucedido en los mercados financieros, encontramos amenazas implícitas en el sistema para la estabilidad social, y por eso tienen que implicarse más los responsables políticos de ese ámbito en el control financiero', defendió Littorin.
Ante las perspectivas de que el paro seguirá aumentando en 2010 aún como consecuencia de la crisis financiera, el comisario europeo de Empleo y Asuntos Sociales en funciones, Vladimir Spidla, instó a los gobiernos nacionales a mantener por ahora las medidas de estímulo económico.
'No es el momento de desmantelar las medidas anticrisis. Para nosotros el fin de la crisis no llegará hasta que haya producción neta de nuevos puestos de trabajo', señaló.Bruselas, Bélgica
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