Son muy pocos los analistas del gobierno que defienden una mayor flexibilidad en el yuan y que sostienen que el Banco Popular de China debería apartarse y permitir que la oferta y demanda dirijan el valor de la moneda.
Este es el momento adecuado para que China reforme su régimen cambiario, informó un economista del gobierno chino.
Fan Jianjun, un investigador financiero del Centro de Investigación del Desarrollo, un centro de investigación dependiente del gabinete, dijo al China Economic Times que el banco central debería detener su intervención cambiaria y dejar que las fuerzas del mercado decidan la tasa del yuan.
Sin embargo, la visión de Fan representa a una minoría.
Son muy pocos los analistas del gobierno que defienden una mayor flexibilidad en el yuan y que sostienen que el Banco Popular de China debería apartarse y permitir que la oferta y demanda dirijan el valor de la moneda.
La meta de la reforma cambiaria de China debe ser desarrollar una tasa de cambio basada en el mercado para que el banco central, una vez libre de la responsabilidad de controlar a la moneda, se pueda concentrar en su política monetaria y la estabilidad económica, indicó Fan.
Actualmente, el banco central permite que el yuan suba o baje 0.5 por ciento al día frente al dólar desde una paridad central que fija cada mañana. Mediante sus intervenciones para evitar un alza en el yuan, el banco ha acumulado 2.45 billones de dólares en reservas internacionales, las más grandes del mundo.
Fan señaló que las presiones en los mercados para que el yuan se aprecie frente al dólar se han debilitado considerablemente en las últimas semanas y que la tasa de cambio de la moneda china estaba cerca de un nivel "balanceado".
"Impulsar una reforma en el tipo de cambio actualmente no llevará a una fuerte apreciación en el yuan, y no tendrá un impacto significativo en la economía real", dijo Fan en una entrevista, publicada por su centro de estudios.
Pekín, China
Este es el momento adecuado para que China reforme su régimen cambiario, informó un economista del gobierno chino.
Fan Jianjun, un investigador financiero del Centro de Investigación del Desarrollo, un centro de investigación dependiente del gabinete, dijo al China Economic Times que el banco central debería detener su intervención cambiaria y dejar que las fuerzas del mercado decidan la tasa del yuan.
Sin embargo, la visión de Fan representa a una minoría.
Son muy pocos los analistas del gobierno que defienden una mayor flexibilidad en el yuan y que sostienen que el Banco Popular de China debería apartarse y permitir que la oferta y demanda dirijan el valor de la moneda.
La meta de la reforma cambiaria de China debe ser desarrollar una tasa de cambio basada en el mercado para que el banco central, una vez libre de la responsabilidad de controlar a la moneda, se pueda concentrar en su política monetaria y la estabilidad económica, indicó Fan.
Actualmente, el banco central permite que el yuan suba o baje 0.5 por ciento al día frente al dólar desde una paridad central que fija cada mañana. Mediante sus intervenciones para evitar un alza en el yuan, el banco ha acumulado 2.45 billones de dólares en reservas internacionales, las más grandes del mundo.
Fan señaló que las presiones en los mercados para que el yuan se aprecie frente al dólar se han debilitado considerablemente en las últimas semanas y que la tasa de cambio de la moneda china estaba cerca de un nivel "balanceado".
"Impulsar una reforma en el tipo de cambio actualmente no llevará a una fuerte apreciación en el yuan, y no tendrá un impacto significativo en la economía real", dijo Fan en una entrevista, publicada por su centro de estudios.
Pekín, China
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