Las acciones de Boeing Co experimentan su mayor avance desde diciembre en el mercado de Nueva York, después de que grupo aeroespacial aseguró el jueves que su avión 787 Dreamliner hará su primer vuelo a fines de año y que sus primeras entregas serán en el cuarto trimestre del 2010, ante de lo previsto.
Las acciones de la firma suben 3.40 dólares, o 7.1 por ciento, a 51.22 dólares. Hace unos minutos repuntaron hasta un 9.3 por ciento, su mayor alza desde el 8 de diciembre.
Expertos del sector comentan que el anuncio de Boeing despeja varias interrogantes que rondaban al nuevo modelo de aeronave de compuesto de carbón.
La aeronave, que ya lleva una demora de dos años respecto a su calendario original, iba a tener su primer vuelo de prueba en el segundo trimestre del 2009, pero fue retrasado para que Boeing pudiera arreglar un problema estructural de la máquina.
El segundo fabricante de aviones del mundo había concluido que los aviones de prueba del retrasado 787 no tienen valor comercial, debido a las necesarias modificaciones que se les han realizado.
La firma añadió que los costos registrados previamente por los primeros tres aviones de prueba serán reclasificados como gastos de investigación y desarrollo.
Esto le significará un cargo estimado en dos mil 500 millones de dólares antes de impuestos, o 2.21 dólares por acción, que serán absorbidos en los resultados del tercer trimestre. Los analistas esperan una ganancia de 1.20 dólares por acción para ese periodo. (Con información de Finsat/MCH) México, D.F. (El Financiero)
Las acciones de la firma suben 3.40 dólares, o 7.1 por ciento, a 51.22 dólares. Hace unos minutos repuntaron hasta un 9.3 por ciento, su mayor alza desde el 8 de diciembre.
Expertos del sector comentan que el anuncio de Boeing despeja varias interrogantes que rondaban al nuevo modelo de aeronave de compuesto de carbón.
La aeronave, que ya lleva una demora de dos años respecto a su calendario original, iba a tener su primer vuelo de prueba en el segundo trimestre del 2009, pero fue retrasado para que Boeing pudiera arreglar un problema estructural de la máquina.
El segundo fabricante de aviones del mundo había concluido que los aviones de prueba del retrasado 787 no tienen valor comercial, debido a las necesarias modificaciones que se les han realizado.
La firma añadió que los costos registrados previamente por los primeros tres aviones de prueba serán reclasificados como gastos de investigación y desarrollo.
Esto le significará un cargo estimado en dos mil 500 millones de dólares antes de impuestos, o 2.21 dólares por acción, que serán absorbidos en los resultados del tercer trimestre. Los analistas esperan una ganancia de 1.20 dólares por acción para ese periodo. (Con información de Finsat/MCH) México, D.F. (El Financiero)
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